Desde los albores de la aviación de guerra, los aviones se fueron especializando en dos tipos de combate; aire-tierra y aire-aire. Los aviones aire-tierra se los llama normalmente bombarderos, suelen tener grandes dimensiones, ser relativamente lentos y alojan en sus bodegas una gran cantidad de armamento. Por su lado, los aviones aire-aire son llamados comúnmente cazas, son de pequeñas dimensiones, ligeros y muy veloces. El objetivo de los bombarderos es destruir posiciones enemigas en tierra; el de los cazas, es derribar otros aviones enemigos. Sin embargo, mientras que los bombarderos suelen estar especializados en el combate aire-tierra, en la actualidad, gran parte de los cazas integran funciones tanto de aire-aire, como de aire-tierra. Dependiendo de la importancia que se otorgue a cada una de estas funciones tendremos distintos tipos de cazas. Así, los cazabombarderos son cazas especializados en batallas aire-aire, que también pueden realizar operaciones aire-tierra. Los cazas polivalentes, en cambio, sirven tanto para operaciones aire-aire, como aire-tierra. Solo los cazas de superioridad aérea y los interceptores están especializados en batallas aire-aire.